jueves, 28 de octubre de 2010

Desdichos

Los Desdichos solían ser versiones desafortunadas de dichos populares. Dicho de otro modo: dichos desdichados.

El desdicho de hoy, en cambio, desdice (dichosamente, decimos) a uno de los dichos clásicos.

“Somos Nada.” (Sí, sí: “Nada” con mayúscula.)

Si el dicho popular “No somos nada” parece referirse a lo insignificantes que somos, el Desdicho “Somos Nada” (“Nada” con mayúscula) se refiere a que no somos una cosa, a que no somos cosas o, mejor dicho, a que somos no-cosas.

Dicho de otro modo (y dicho en otro idioma), somos “nothing”, es decir: somos “no-thing”.



Porque estamos vivos, dirá alguno...

Porque no somos cosas sino procesos, dirá otro...

Porque no somos materia sino energía que fluye, agregará otro más...

Nada, nada de eso, decimos nosotros (queriendo decir: sí, sí, exactamente todo eso).

martes, 26 de octubre de 2010

“Ser y no ser, ésa es la cuestión...”


Adaptación del monólogo de Hamlet a la filosofía oriental.

(Por eso de que los polos opuestos se engendran mutuamente, tal vez... Y por eso de que no puede existir un polo sin el otro, quizá... Y también por eso de que los polos opuestos forman una unidad, seguramente...)

viernes, 1 de octubre de 2010

Hermúsica

Música hermosa.

¿Cuál?

Casi toda, diríamos (al menos: mucha... pero mucha, mucha).

Para nosotros, de Sinatra al Dúo Salteño, pasando por Bill Evans, por ejemplo...

...Y la guitarra flamenca de Rafael Cortés, y la guitarra folclórca de Juan Falú, y el piano mínimo de Eric Satie... y Jobim y Joao en Brasil, y Sabina y Serrat en España...

¡Y los Beatles!... en todos lados...

Y mucha Hermúsica más: los cuartetos de cuerda de Hydn, por ejemplo, y los quintetos de Brahms, y las Suites para chelo de Bach... en fin, la lista es larguísima (interminable, diríamos), para nosotros, al menos.

(Chet Baker Baker cantando y tocando la tompeta, Omar Moreno Palacios y su guitarra endiablada, Telemann, en otoño...)



Pero la más hermosa de todas las Hermúsicas: aquella que canta uno mismo (en la ducha, por ejemplo, o en el parque), sin que tenga ninguna importancia si uno lo hace bien o lo hace mal...